La última asamblea General del AMPA CEIP Maestro Tarazona aprobó por unanimidad, su oposición a la ubicación de este espacio, a escasos metros del colegio y en la misma puerta de entrada de los aularios de Infantil. A pesar de que según ha explicado el delegado de Urbanismo, Paco Villar, “la superficie del recinto es de tierra para que los canes puedan hacer sus necesidades en cualquier lugar del parque, aunque sus dueños deberán seguir haciéndose responsables de recoger las deposiciones”, que hay un informe a la Consellería de Sanidad de la Generalitat Valenciana que determina que no tendrá ningún efecto nocivo para la salud de los escolares y que “habrá un mantenimiento con labores de limpieza”.
Las familias de la Comunidad Educativa , creen que si realmente se le da un uso que justifique la creación e inversión de este recinto, serán inevitables los malos olores ante la imposibilidad de recoger los orines y estarán vigilantes para que la recogida y limpieza de los residuos sólidos se produzca con la periodicidad necesaria, aumentándose esta en las épocas de mas calor, también exigirán que se inste a los propietarios que cumplan estrictamente con la ordenanza de convivencia, no solo dentro del recinto, sino también en las proximidades y trayectos hasta sus domicilios, solicitando si fuese necesario la presencia de Policía Local en las horas de entrada y salida de los niños.
Aunque esperan que no se produzcan molestias acústicas en las horas lectivas, caso de producirse, solicitarían que se limite el uso fuera de esas franjas horarias.
Cabe destacar que las familias nunca se han posicionado en contra de la construcción de este tipo de recintos, únicamente se cuestiona la ubicación elegida y el momento en que se realiza esta inversión, al entender que en estos momentos de dificultad económica habría otras áreas de inversión más prioritarias.
La construcción del parque ha contado con un presupuesto de 12.000 euros
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