Viernes, 23 Mayo 2014
Han pasado 6 meses desde que, por última vez, me asomé a esta ventana en la que El Económico, generosamente, da cabida a mis filias y fobias, a mis verdades, observaciones, constataciones y opiniones, ademas de conclusiones. Tiempo obligado por cuanto me propuse no “usar”, e intervenir en este espacio personal, con motivo del último desencuentro prolongado que mantengo con mis superiores jerárquicos y algunos y algunas colegas del mismo rango en relación al tema educativo; tema educativo que centra mis colaboraciones en el este Blog. En este caso sobre el Expediente Disciplinario(el segundo) que me fue abierto como funcionario docente el 2 de octubre de 2013 por al Dirección General competente, a propuesta(ya veremos y conoceremos) o como consecuencia(se lo contaré a ustedes), de los informes de la Dirección del Centro de destino (desde 1992, CEIP MAESTRO TARRAZONA, en el Puerto de Sagunto), del Inspector de Zona, de algunas colegas de Infantil(o ya veremos), no sé si de los miembros del C. Escolar asistentes a una sesión el 3 de junio de la que no me dan acta certificada, o...Se publican íntegramente LOS HECHOS PRESUNTOS, a petición mía, en la edición en papel última de este medio de comunicación(aquí, al lado), y ahora que ha finalizado mi declaración sobre los hechos presuntos, éstos que en su día “debí cometer”. Muy graves parecen ser. Así, de entrada. Falsedades, lo son, ya se lo digo yo. Insinuaciones graves, encierran; aunque difíciles de demostrar por mi parte, pero todo se andará. Mala fe, a raudales. Parcialidad, multiplicada. Ganas de saber previamente mi versión: nin-gu-na. ¿para qué la querrían?
Una manera como otra cualquiera de meter miedo, intento de acorralarte, de desprestigiarte, de hacerte abandonar el destino; o de que, como ocurrió allá por el curso 2008-09, caigas enfermo por agotamiento y ansiedad y necesites recurrir al ESERTIA y alORFIDAL.
Soy un profesor(mejor, maestro de infantil), y me lo creo. Y además, bueno. Me creo capaz, muy capaz, de controlar un aula de 5 años; y de tres, y de cuatro; también de 6º de Primaria, y hasta de Educación Especial o similar. Mis alumnos no me faltan al respeto(más allá de algunas pequeñas acciones que traen aprendidas de la calle, la familia, la escuela, como a otros). A algunos docentes les molesta la cercanía, la flata de distancia que podamos tener y practicar mis alumnos y yo. Ni me insultan, ni me escupen, y menos se me salen de la clase sin control hasta la calle(ni aún estando la mayoría de veces la puerta exterior abierta a las entradas y salidas, y sin control).
Quien genera situaciones no apetecibles y desalentadoras lo serán los que incumpliendo la más elemental de las normativas, y la aplicación de acuerdos, practican la ocultación de la información, la toma de decisiones en donde no corresponde, las órdenes sin respaldo normativo, el favoritismo …Quien mete a los alumnos de infantil(175) en los camerinos de la Casa de la Cultura al calor de un 30 de mayo sin agua y las luces apagadas. Quienes durante el curso pasado no fueron capaces de darme un copia de la supuesta Memoria o Informe final de curso, que la sigo demandando, siendo como lo es, un documento público en un centro público, y que como miembro del Claustro tengo que informar, incluso votar. No tengo copia de la PGA del curso 2013-14 que se supone tengo que cumplir. Y, por hoy, no quiero seguir.
Sencillamente, es falso, repugnantemente falso, que yo haya amenazado, utilizado malos modos e intimidado a las limpiadoras(¡todas!) y a las monitoras del comedor(¡todas!); pero no dicen a quiénes, cuándo, en dónde, por qué motivo. Ya lo desmentirán ellas/ellos, o sus empresas: la SAG y CONTALABOR, pues a sus empleados/as ponen en una pública tesitura.
Uso una cámara fotográfica para dejar constancia de las actividades didácticas y actos que me da la gana porque estoy respaldado por una autorización de los padres conforme a normtiva, sea tutor o maestro de apoyo. Paseo con ella por el pueblo, y fotografío lo que me sugiere y legalmente puedo. Soy fotógrafo aficionado. Secretario, que lo fuí, de AGFOVAL y del FOTO CLUB VALENCIA. Tengo que recurrir(en pleno siglo XXI) a dicha herramienta para tener una mera copia de la información expuesta en los tablones o vitrinas con cristal cerradas, que me corresponde por derecho, recogido en la normativa, y que en otros centros la remiten por correo o te la facilitan previamente. He tenido que recurrir a un prehistórico móvil para parar a quien pretendía provocar una situación acusatoria. Y sí, le he dicho: “ahora vas, y me denuncias”, que no es lo mismo. ¿Cuáles son las aulas en donde no me corresponde entrar? ¿Son propiedad de la Dirección, del tutor, de....? ¿Es que nadie ve al resto(y expedientan) hacer fotos(incluidos padres y madres) en el centro, en cualquier circunstancia, con su flamante smarfhon con cámara incorporada de 20 megapilxes y vídeo HD, etc, y mandarlas al instante por WhatsApp, Facebook, Twitter y demás al favorito, al abuelo, la novia/o, al que me da jabón, estando trabajando, y publicarlas en los blogs esos sin ningún control, y que pretenden sustituir a la acción tutorial directa?
Alguien tendrá que probarlo, o en su defecto, dar cuentas de lo que ha escrito, manifestado o testificado, y que a día de hoy, no sé. Ya se lo cuento.
Mis alumnos/as de 5 años A en el curso anterior, más allá de alguna de sus situaciones personales sobrevenidas, y alguna incidencia puntual ¡si yo les contara otras! han sido geniales. Lo que evaluo, firmo y afirmo como tutor que lo fui. Hoy seguimos siendo cómplices y guardamos un afecto a prueba de Expedientes Disciplinarios.
